Nada y todo lo que ser es absoluta verdad, ¿que ves a través del agujero? ¿Lo que ves es real? y si yo veo otra cosa…. ¿Es mi verdad opuesta a la tuya??
Todo existe y se configura desde el sesgo del observador, tu verdad, y mi verdad, solo son verdades parciales y solo se construyen mediante la reflexión conjunta.
YOLANDA GARCÍA DELGADO.
Lleva casi tres décadas dedicada al Arte y fue una de las primeras mujeres que apostó por la piedra en Jaén. Experta en cantería desde que tenía 23 años, hoy es una escultora y pintora muy reconocida y querida en la ciudad, una mujer que expresa emociones con un Arte sin pretensiones, que llega a las personas.
Después de años de dedicación, reconoce que la piedra manda. “Con la piedra hago lo que quiero y casi nunca lo que he dibujado. La piedra te va mandando”, dice.
Se inició en la Escultura probándose con distintos proyectos, empezando con una obra figurativa y evolucionando hacia lo emocional, expresando conceptos abstractos. “No es fácil”, reconoce.
En la faceta de creación personal, trabaja la emoción y lo hace en dos campos, la escultura y la pintura, construyendo la misma idea en los dos estilos. Por ejemplo, en la escultura ‘Constructo humano’ muestra que una persona es cultura, naturaleza y sangre, además de emociones y temperamento. En el cuadro con el mismo nombre, Yolanda García muestra facetas del ser humano como el miedo, el sexo y los ancestros, además de “los chismes y cacharros que cada uno tiene y que forma parte de él como ser humano”. De ahí que afirme que el ser humano se construye de diferentes facetas y que García analiza en sus pinturas y esculturas.
La artista, a través de sus obras, intenta que las personas analicen sus emociones. “Hay quien pasa por la vida sin pena ni gloria. A muchas personas les falta intensidad a la hora de vivir. Viven de pasada y esta vida no es un ensayo”, reconoce García. De ahí que con su obra haga soñar a quienes no sueñan y despertar a los dormidos.
Una de sus constantes es el autoconocimiento y desde lo más pequeño y más personal, extrapolar a lo universal, de la emoción intima, llevada hacia el colectivo y universal.
Emplea diferentes materiales, como el bronce, la piedra o la madera. Dos campos artísticos para trabajar la emoción, para invitar al espectador a “sentir” la soledad, los recuerdos o los “grados de locura” que se esconden bajo la mente, Las obras están llenas de energía y plasman la capacidad de sentir y “despertar” del cuerpo. “El ser humano se construye de diferentes facetas, de una realidad imperfecta y eso es lo que analizo en mi trabajo”, explica García, que dice que a través de sus “manos” intenta que cualquier persona analice su “propia vida”. Pinturas y esculturas de las que se vale, al mismo tiempo, para expresar, dice, lo que atesora en su interior. “Intento expresar todo lo que llevo dentro. Cuando tengo que esculpir me paro y pienso cómo sería la imagen de lo que quiero contar, es un lenguaje simbólico íntimo que solo puede leerse a través de la emoción. Así intentó representar el silencio, el amor, el alma o de lo que significa el vacío. Siempre intento unir distintos materiales, conseguir una imagen que al espectador lo transporte hasta la sensación que yo deseo mostrarle”, desvela la escultora, que también utiliza su propia obra artística, como intérprete de sus propias emociones y vivencias, es una comunicación en ocasiones a gritos, “aunque solo estemos mi obra y yo”, sentencia la artista.